Lejos de los fenómenos de “desterritorialización” y “desmaterialización”, hoy asistimos a la aparición de ecosistemas digitales claramente anclados en lo territorial. Las discusiones sobre la regulación de la inteligencia artificial, las plataformas y el uso de datos personales se vuelven centrales frente a un escenario mundial de tensiones y reconfiguraciones regionales.
“La inteligencia artificial es un desafío para muchos sectores y profesiones. Los gobiernos que buscan el desarrollo económico deben defender la soberanía digital. En el caso de las universidades, es importante aprovechar las aplicaciones que desarrollen en el ámbito de la inteligencia artificial para encontrar soluciones para el colectivo: modelos de lenguaje a partir del conocimiento público que permitan innovar con herramientas al servicio de la autonomía tecnológica”, dijo el historiador de la ciencia Evgeny Morozov, que esta semana visitó nuestro Campus para ofrecer la conferencia “La geopolítica de la inteligencia artificial y la soberanía digital”. Allí, el autor de El desengaño de Internet. Los mitos de la libertad en la red (2012) propuso pensar formas alternativas de vincularnos con las tecnologías digitales en los ámbitos local, regional y global. “De lo que se trata es de encontrar un equilibrio entre una resistencia informada y una visión más constructiva”, advirtió.
Organizaron Lectura Mundi (UNSAM), Casa Patria Grande, FLACSO, Fundación Vía Libre y el Observatorio de Impactos Sociales de la Inteligencia Artificial (UNTREF).
Sobre Evgeny Morozov
Doctor en Historia de la Ciencia por la Universidad de Harvard, Morozov escribió varios libros sobre tecnología y política, y artículos para medios como The New York Times, The New Yorker, The Guardian, New Left Review y London Review of Books. Produjo The Santiago Boys, un podcast de nueve capítulos sobre el Chile de Salvador Allende, y fundó The Syllabus, una plataforma de curación de contenidos digitales en la que se desempeña como editor.