René estuvo preso en la Unidad Penitenciaria N.º. 48 de José León Suárez hasta hace poco más de un mes. Ahí mismo, en el Centro Universitario San Martín (CUSAM), logró terminar la Diplomatura en Logística. Una de las primeras cosas que hizo cuando recuperó su libertad fue inscribirse en la Tecnicatura en Gestión y Tecnología Ferroviaria que ofrece el Instituto de Transporte (IT) de nuestra Escuela de Hábitat y Sostenibilidad (EHyS). Ahora se prepara para empezar a cursar las materias del Curso Preparatorio Universitario (CPU), convencido de que este nuevo camino “es hermoso”.

“Creo que el estudio es el camino para muchas cosas, tanto para uno como para la familia y los hijos. Todos dicen que en la cárcel pasa esto o aquello, pero no es tan así; hay muchos chicos que quieren cambiar su vida, que pueden estudiar y ahí te dan la oportunidad de hacerlo”, cuenta René, que igual reconoce que hay que tener ganas, porque estudiar requiere dedicación y esfuerzo, y la situación en las unidades penitenciarias, en las que muchas personas conviven y no todas estudian, a veces complica la tarea. “Es ahora, no puedo perder más tiempo. Dentro de unos años quiero poder sentir que valió la pena el esfuerzo y que mis hijos me tengan de ejemplo, que puedan decir: ‘Mirá, mi papá cambió’”. 

La nota completa, acá.