Al menos para el proyecto internacional Q-U Bolometric Interferometer for Cosmology (QUBIC), que a fines de 2021 tendrá instalado en la Provincia de Salta un megatelescopio de microondas especialmente diseñado para detectar los fotones que viajan por el cosmos desde el inicio de los tiempos. ¿El lugar elegido para alinearlo? Un punto clave ubicado en el valle Abra Alto Chorrillos, cerca de la localidad de San Antonio de los Cobres, donde las condiciones atmosféricas y de altura son excelentes.
“Con este observatorio podremos estudiar los albores del universo, esas fracciones de segundos que sucedieron al Big Bang”, explicó en esta nota Alberto Etchegoyen, director del Instituto de Tecnologías en Detección y Astropartículas (ITEDA) de la Escuela de Ciencia y Tecnología (ECyT) y técnico encargado —junto con Beatriz García, vicedirectora del ITEDA— del diseño del sitio que alojará al telescopio. “Si logramos datar esa radiación cósmica, quizá podamos encontrar las pruebas de la creación del universo”, amplió el especialista en astrofísica y sistemas de detección de la UNSAM.
Aunque usted no lo crea, la estación QUBIC funcionará a 800 metros del futuro Observatorio LLAMA (Large Latin American Millimeter Array), otro ambicioso proyecto —argentino-brasilero— para la observación astronómica en longitudes de onda milimétricas y submilimétricas del que también participa la UNSAM. Estas iniciativas son parte del consorcio Salta, Ventana al Universo que impulsa el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación para potenciar las capacidades locales en los campos de la astronomía y la astrofísica.
Estación QUBIC (render)